Desarrollado sobre la base de antiguas fórmulas de artesanos renacentistas italianos y optimizado con el agregado de aditivos de última generación, dimos a luz lo que en Italia se conoce como Marmorino (rasatura di marmo ) sólo que en homenaje a la cuna que lo vio nacer lo llamamos Venezino.
De acabado extraliso, permite efectos decorativos de sorprendentes resultados estéticos. Su versión Ántico –para su aplicación tanto en interior como en exterior- exhibe un aspecto suavemente esfumado de elegante acabado sedoso al tacto. Su versión Lúcido –para su aplicación solo en interior- permite un sinfín de posibilidades y combinaciones todas ellas semejantes en aspecto al del mármol natural, superficies que iluminadas convenientemente potencian el brillo de un exclusivo acabado espejo.